Cuando llegue todos los de la banda eran viejos y tenían los dedos y los sueños rotos pero dijeron que siempre estarías en sus canciones. El bajista que era un tío simpático aunque le faltara una pierna me dijo que dejara de buscarte o nunca te encontraría.
Esa noche no había nadie pero dimos un gran concierto le dedicamos una canción a las chicas que no saben lo que quieren pero nunca se arrepienten y nunca nos volvimos a ver.
Reseña libro: La Mestiza, por Kal-El
Hace 2 años
1 comentarios:
a las chicas y chicos que no saben lo que quieren no hay que dedicarles una cancion...sino un concierto.
Publicar un comentario